Ser Emprendedor

Emprendedor es quien monta su propio negocio por diversas razones:

  • desarrollar sus ideas creativas, ser útil a los demás,
  • no depender de nadie,
  • ponerse a prueba o buscar una salida para ganarse la vida.
  • algunos eligen esta posibilidad porque en su familia siempre fueron comerciantes o industriales,
  • otros después de haber trabajado en una gran empresa o en la administración,
  • o porque supone la única forma de conseguir una ocupación e ingresos actualmente.

Aunque el término empresario sería igualmente apropiado para un emprendedor, lo cierto es que en algunos sectores del ámbito político o intelectual el primero es visto como una persona interesada, dedicada a maximizar sin escrúpulos sus beneficios y con poco respeto de sus obligaciones con la sociedad, de las normas laborales o fiscales;

Mientras que al emprendedor se le considera un dinamizador social, que

  • crea puestos de trabajo,
  • protege el medio ambiente
  • practica la responsabilidad corporativa.
  • económica y legalmente hablando se trata de un mismo agente
  • un individuo que de acuerdo con sus características personales y principios actúa o no de manera responsable.

Seguramente en los próximos años, las nuevas vocaciones empresariales surgirán como la mejor alternativa para salir adelante. La procedencia social, nivel de formación, patrimonio de partida, nacionalidad, edad o sexo del emprendedor influirán en su enfoque de negocio y de asignación de recursos, pero para que la aventura empresarial salga bien hará falta invariablemente cuidar de varios aspectos esenciales.

Se deberá partir de una idea de producto o servicio implementada de forma competitiva y poseer una serie de cualidades personales y profesionales:

  • capacidad para asumir riesgos,
  • adaptabilidad,
  • creatividad,
  • autonomía,
  • determinación,
  • intuición,
  • flexibilidad,
  • conocimiento del producto,
  • capacidad de negociación,
  • utilización de técnicas de planificación económico-financiera, etc.

A nadie se le escapa que cualquier negocio necesitará un aporte de capital inicial pero por encima de todas las aportaciones, se deberán destacar dos:

  • una gran capacidad de trabajo y no hacerlo solo.
  • El emprendedor o empresario debe estar dispuesto a sacrificar muchos aspectos de una vida “funcionarial” o “por cuenta ajena”: horarios, sueldo estable, vacaciones aseguradas…
  • Y necesita estar asociado, trabajar en red, compartir sus ideas.